Para darles algo de contexto les contaré como fue que terminé en La India. En noviembre del año pasado comencé a trabajar en territorio norteamericano, si, en Nueva Yol, y no es que no estuviese trabajando antes, pero este es el que considero oficial. No tenÃa ni una semana en el trabajo nuevo cuando un compañero me invitó a su boda, ¡una boda hindú en La India!, y yo, como toda persona nacida y criada en mi pequeña isla, pensé que él estaba relajando, ¿cómo es, que este tipo, me invita a su boda si me acaba de conocer?
Igual me quedé con esa idea en la cabeza, dándole forma, le conté a mi hermana y a mi mamá y lo puse a un lado, tenÃa que concentrarme en mi trabajo nuevo y demostrarles lo que sé/soy.
Con el paso de los dÃas el novio y yo nos hicimos amigos y de vez en cuando la conversación se tornaba en: -“Navri, ¿vas a venir a mi boda siempre?”- No voy a enfocarme en el torbellino de emociones entre la idea de materializar el viaje y la compra del boleto aéreo ese Viernes, un mes antes del dÃa del viaje pero los que sà les diré es que, siempre, desde la primera vez que me enseñaron ese paÃs en forma de colmillo en el mapa y leà sobre los monos, la gente y la cultura en general me dije: “wow, ¡que increÃble serÃa ir a La India!”.
Ya el tarjetazo estaba dado y el no haber planificado cada detalle antes de me creo mucha ansiedad, no habÃa mucho tiempo y tenÃa un montón de cosas por definir los lugares y ciudades a visitar luego de la boda, el transporte, el alojamiento, validar mis vacunas, cuáles medicinas llevarme, la ropa, …, y la lista crecÃa y crecÃa.
Dos dÃas antes del vuelo, hice mi maleta e iba tachando cosas de mi lista mientras organizaba. Me hubiese quedado sin ropa a media estadÃa sin la ayuda de mi hermana. Yo, que tiendo a sobre empacar, decidà que en este viaje solo llevarÃa lo mÃnimo, que buscarÃa donde lavar mi ropa allá y resolverÃa con lo que tuviese. Mi hermana que es una trotamundos experimentada me indicó la posibilidad de no encontrar donde lavar mi ropa y entró unos pantalones adicionales y cosas que no ocupaban mucho espacio, pero me resolvieron los casos de emergencia.
Semanas antes del viaje mi lectura del tren pasó a ser mi biblia de la India, el libro de Lonely Planet India, tiene recomendaciones de todo lo que te puedas imaginar y sugerencias de supervivencia. Yo me lo encontré súper bueno, aunque algo pesado si les gusta leer en fÃsico como a mÃ.
Asà inicié el viaje más largo de la vida misma. Con 1 mochila, 1 maleta, 2 aviones, 16 horas en el aire, 2 horas de escala en Qatar, muchos olores, comida de avión, mi cuadernito de dibujar, colores y un corazón palpitante y ansioso, con la sensación que siempre me acompaña en cada viaje importante en cada célula de mi cuerpo, ese latido susurrante de: -“todavÃa no me lo creo”.
JFQ -> DOH -> AMD
-Navri